Neurociencia Creativa: Ecoarte y el Sistema Nervioso en Acción
Bajo el liderazgo del Lic. Dr. Marco Antonio Pinilla Pinilla, se llevó a cabo una enriquecedora experiencia en el área de biología con estudiantes de Ciclo IV, en la que se integraron contenidos sobre el sistema nervioso central y periférico y los órganos de los sentidos. Esta propuesta, también conocida como neuroarte escolar o neurociencia aplicada a la educación, se desarrolló con un enfoque ecoartístico que despertó creatividad y conciencia ecológica.
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La actividad se basó en la construcción de modelos anatómicos del sistema nervioso y los órganos sensoriales, empleando materiales reciclables como papel, cartón, tapas plásticas y botellas. Este enfoque didáctico, denominado ecoarte, buscó representar las estructuras neuronales a través del arte y los colores, reforzando así el aprendizaje visual, la memoria y el pensamiento crítico.
¿Qué aprendimos?
Descubrimos cómo los sentidos como la vista, el oído y el tacto recogen información del entorno y la envían al cerebro a través de los nervios. También entendimos cómo el cuerpo responde gracias a esas señales. Aprendimos jugando, observando y creando con nuestras manos.
Relación entre neurociencia y sentidos
Se explicó de forma clara cómo el sistema nervioso actúa como eje de procesamiento de toda la información que recibimos a través de los sentidos. Esta comprensión fue aplicada mediante la creación de esquemas tridimensionales que representaban los órganos sensoriales conectados a sus rutas nerviosas respectivas.
Esta actividad reafirma que la enseñanza de la biología puede ser significativa, interdisciplinaria y transformadora cuando se integra con metodologías innovadoras como el ecoarte. Además, fomenta el respeto por el ambiente y la apropiación del conocimiento a través del hacer.
Conclusiones de la jornada
La “Neurociencia Creativa” no solo permitió aprender ciencia, sino también vivirla desde una experiencia cercana, tangible y creativa. El uso de ecoarte se consolidó como una herramienta valiosa para afianzar contenidos, generar motivación e incentivar la participación activa de los estudiantes. Una práctica que demuestra que el arte y la ciencia no están reñidos, sino que se complementan para construir conocimiento vivo.
